En la presidencia del general Rafael López Gutiérrez en el año de 1920, a iniciativa del Poder Ejecutivo se incorporó en el Código de Instrucción Público el plan de estudios para la carrera de Ingeniería Civil, fundándose al efecto esta escuela, habiendo además destinado el Congreso Nacional las partidas precisas, en el presupuesto general de gastos para el sostenimiento de dicho importante establecimiento educativo.
Este plan de estudios de Ingeniería, comprendía Agrimensura, Topografía y Civil, siendo las dos primeras las directrices orientadoras de dicho plan. Para ese año el número de matriculados no fue suficiente para abrir el primer curso, por lo cual fue necesario además de los bachilleres inscritos permitir temporalmente el ingreso de profesores de instrucción primaria, cadetes graduados de la Escuela Militar (Alférez) y artesanos graduados de la Escuela de Artes y Oficios. Esto dio como resultado una avalancha de estudiantes que hizo inadecuada cualquier aula de la Universidad para dar alojamiento a más de setenta alumnos que constituyó el primer curso de aquel año. De ese curso, solo lograron completar en tiempo, sus estudios universitarios de ingeniería cuatro alumnos.
El primer decano de la facultad de Ingeniería fue el ingeniero y abogado don Manuel A. Reina de 1920 a 1925, un profesional visionario en el cual imprimió conceptos en las mentes de sus estudiantes sobre planificación y desarrollo integral del progreso del país. Entre los primeros docentes que impartieron clases en los primeros años fueron el ingeniero militar Amado Cuellar, con estudios de postgrado en Saint Cyr, Francia; el ingeniero José Augusto Padilla egresado del Boston Tech, Estados Unidos; el ingeniero Norberto Guillén graduado en Bélgica; el ingeniero Agustín de la Rocha con estudios en Alemania y el arquitecto Fernando Pineda Ugarte graduado en Suiza.
Otros profesionales ingenieros que fueron decanos son los siguientes; Medardo Zúñiga Vega, José Augusto Padilla, Rubén Clare Vega, Alfredo Membreño, Lisandro Suárez, J. Francisco Mejía y Rubén Callejas. Cuando fue decano el ingeniero Lisandro Suárez fue el que introdujo las primeras reformas al plan de estudio de la carrera, para que los futuros egresados tuvieran la capacidad necesaria para trabajar no solo en el país sino que se proyectaran en el exterior.
De los egresados de la Escuela de Ingeniera de Honduras en las décadas de los años treinta y cuarenta, que trabajaron como docentes, cabe mencionar a los ingenieros Luis Ulloa, Roberto Domínguez, Sabino Mass, Raúl Lardizábal Galindo, Raúl Callejas, Ernesto Matamoros, Federico Boquín, Tiburcio Calderón, Arturo Quesada y los ingenieros Guillermo Inestroza y Ramiro Zúñiga, graduados del Rensselaer Polytechnic Institute, Estados Unidos.
La Universidad José Cecilio del Valle es la primera que crea la carrera de Arquitectura el 01 de febrero de 1978, la cual se aprobó por la Comisión Nacional de Educación Superior, según acta número 03 del 30 de abril de 1980. Esta institución de Educación Superior Privada de Honduras, fue fundada en 1978 por iniciativa de la Asociación Hondureña para el Fomento de la Educación Superior (AHFES). Sus primeras reformas del plan de estudios fueron aprobadas por la Dirección de Educación Superior en 1995 y las segundas reformas en el año 2005. El perfil de los egresados de arquitectura de esta universidad son las de proyectar, diseñar, dirigir, ejecutar, supervisar, rehabilitar diferentes proyectos arquitectónicos y paisajísticos al igual la de investigador, urbanista, colaborador con el medio ambiente e integrador de los avances tecnológicos del presente.
Ambas carreras profesionales, una centenaria y la otra con cuarenta y dos años de creación son importantes por la labor espléndida de tan trascendentes resultados, las cuales ambas representan una trayectoria magnífica de cultura y una contribución paradigmática en el campo inmenso, fértil y constructivo de las ciencias y las artes.
